ChatGPT Search vs. Google: ¿David contra Goliat o un brindis al sol?

Oh, el SEO, esa fascinante batalla eterna entre humanos, algoritmos y un pequeño amigo llamado “índice”. Justo cuando pensábamos que todo giraba en torno a Google, llega ChatGPT Search, el nuevo “jugador” que, según OpenAI, promete cambiar la forma en que buscamos información en línea. ¿Es esto el fin del reinado absoluto de Mountain View? ¿O simplemente otro truco que hará bostezar a los SEOs veteranos mientras revisan su café de la mañana?

No se emocionen demasiado; no estamos ante la segunda era del SEO. Más bien, estamos hablando de una herramienta que, aunque interesante, sigue dependiendo del mismo Bing al que le hacemos ojitos cada tanto, pero rara vez invitamos a la fiesta. Vamos a analizar este fenómeno con un objetivo claro: entender si ChatGPT Search realmente merece nuestra atención… o nuestra paciencia.

RAG: No es una banda de garage, es una estrategia (pero suena igual de cool)

ChatGPT Search no es un motor de búsqueda completo. No, no se molesten en comparar sus resultados con Google, porque su base es el “Retrieval-Augmented Generation” o, como me gusta llamarlo, “el primo técnico que siempre tiene una excusa para no venir a las reuniones familiares”. Básicamente, ChatGPT usa el índice de Bing para buscar información y luego le añade un toque generativo para que parezca más listo de lo que es.

¿La magia? Si pides algo reciente, ChatGPT Search te lo entrega envuelto en un bonito lazo, con enlaces a las fuentes, como si quisiera decir: “Mira, no soy Google, pero hago mi esfuerzo”. Claro, aún tiene problemas con la latencia y a veces parece que está “pensando demasiado”. Pero eh, ¿quién no tiene sus días lentos?

El verdadero potencial aquí radica en cómo utiliza los datos. No necesitas estar en el top 10 de Bing para aparecer en las respuestas. ¡Sí, escuchaste bien! Ahora tus páginas olvidadas y marginadas tienen una oportunidad de brillar… siempre y cuando estén indexadas. Así que, SEOs del mundo, desempolven esas Bing Webmaster Tools y apliquen las buenas prácticas que llevan ignorando años.

¿Google debería temblar? No, pero alguien sí

Vale, aquí viene la pregunta del millón: ¿debería Google preocuparse? Pues no exactamente. Por ahora, Google sigue siendo el todopoderoso del universo de las búsquedas, con una cuota de mercado tan sólida como tus excusas para no actualizar tu sitio. Además, Google ya lanzó Gemini, su propio juguetito de IA, que básicamente hace lo mismo que ChatGPT Search, pero con menos ruido mediático.

Sin embargo, para Perplexity AI (sí, lo sé, ni sabías que existía), ChatGPT Search es la pesadilla definitiva. La funcionalidad de OpenAI podría enviar a este tipo de herramientas independientes directamente al cajón de “tecnologías olvidadas”. Un caso claro de “grande se come al pequeño”. Lo siento, Perplexity, fue lindo mientras duró.

¿Y Bing? Bueno, el pobre sigue en su lucha por ser relevante. Ahora, gracias a ChatGPT Search, tiene una nueva oportunidad de ser algo más que “ese motor de búsqueda que usas por accidente”. Tal vez, solo tal vez, esta sea su entrada triunfal a la fiesta del SEO moderno.

¿Qué significa esto para los SEOs? Prepárate para rascarte la cabeza

Aquí es donde empieza la diversión. Si eres SEO, prepárate para ajustar tu brújula hacia Bing, sí, ese Bing que tienes en un rincón del olvido. Porque aunque ChatGPT Search no reemplace a Google, sí abre un nuevo frente de batalla. Ahora, no solo necesitas optimizar para aparecer en los SERPs, también debes asegurarte de que tus páginas sean vistas como fuentes confiables por ChatGPT.

Esto implica varias cosas: desde asegurarte de que tus páginas están indexadas en Bing (gracias, Bing Webmaster Tools), hasta hilar más fino en cómo presentas tu contenido para ser citado por la IA. Ah, y no olvides comparar tus URLs entre Google y Bing, porque sí, ahora te toca jugar en dos terrenos.

La buena noticia es que no necesitas reinventar la rueda. Muchas de las tácticas que usas para Google también aplican aquí. Solo que ahora, además de buscar ese ansiado lugar en los rankings, deberás asegurarte de aparecer en las respuestas generativas. ¿Fácil? No. ¿Divertido? Tampoco. Pero eh, al menos tendrás algo nuevo de qué hablar en las reuniones de marketing.

ChatGPT Search, ¿un cambio o solo humo?

ChatGPT Search no es el apocalipsis de Google, pero sí es un recordatorio de que el SEO nunca deja de evolucionar. Más que un “David contra Goliat”, esto se siente como una partida de ajedrez en la que Bing finalmente se movió de su esquina. Si bien no va a destronar a Google, podría hacer que reconsideremos la importancia de diversificar nuestras estrategias.

Así que, queridos SEOs, saquen esas Bing Webmaster Tools del cajón y pónganse manos a la obra. Porque, quién sabe, tal vez Bing y ChatGPT Search sean el próximo gran romance del SEO… o simplemente una anécdota divertida que contaremos dentro de unos años.