Google está atravesando uno de sus momentos más interesantes. Un cambio clave en su liderazgo, con Prabhakar Raghavan dejando el puesto y Nick Fox tomando las riendas de la búsqueda y publicidad. Este podría ser el punto de inflexión que tanto se ha anticipado. ¿Será el renacimiento de la calidad en los resultados de búsqueda?
El adiós de Prabhakar Raghavan: ¿Un líder bajo el fuego?
Prabhakar Raghavan no es cualquier directivo de Google, su legado incluye hitos como la integración de la inteligencia artificial en productos tan populares como Gmail. Bajo su mando, surgieron innovaciones como Smart Reply y Smart Compose, herramientas que redefinieron la forma en la que interactuamos con los correos electrónicos. Sin embargo, su mandato en la búsqueda y la publicidad no fue igual de brillante.
En los últimos años, Raghavan recibió duras críticas por anteponer la publicidad sobre la calidad de los resultados de búsqueda. Se le acusó de dejar que Google Ads se colara demasiado en las SERPs (páginas de resultados de búsqueda), afectando la experiencia del usuario. Incluso, hubo un momento denominado “Code Yellow”, una especie de crisis interna donde se priorizó la monetización sobre la mejora de los resultados orgánicos. ¡Todo para aumentar los ingresos!
Este enfoque llevó a la publicación de un artículo de opinión donde se afirmaba que Raghavan había “orquestado la muerte de Google”. Aunque la afirmación es dura, refleja un sentir generalizado: la búsqueda de Google ya no es lo que solía ser. Y ahí es donde entra Nick Fox.
¿Nick Fox podrá mejorar los resultados de búsqueda?
Ahora es el turno de Nick Fox, un veterano de Google que ha estado en la compañía desde 2003. Fox ha sido clave en productos innovadores como Google Fi y el sistema de mensajería RCS. Pero su nuevo rol es mucho más desafiante: devolver la calidad a los resultados de búsqueda, mientras equilibra las necesidades publicitarias.
Fox tiene una experiencia vasta en productos y diseño, especialmente en áreas como el asistente de Google y otros servicios de inteligencia artificial. Además, su llegada coincide con un momento crucial para Google, que está bajo la lupa de los reguladores por posibles prácticas monopólicas. Fox no solo tendrá que mejorar los resultados de búsqueda, sino también manejar la creciente presión legal y competitiva, especialmente frente a rivales como Microsoft y OpenAI. ¡Un desafío digno de un gigante!
Lo más disruptivo aquí es que Fox podría hacer algo inesperado: acelerar aún más la integración de la IA en la búsqueda y los anuncios. ¿La IA podría convertirse en el salvavidas de la calidad en los resultados de búsqueda? Solo el tiempo lo dirá.
La reestructuración en Google es mucho más que un cambio de líderes
Este cambio de líderes no es un hecho aislado, sino parte de una reestructuración mayor dentro de Google. El equipo de la aplicación Gemini, que trabaja en productos de inteligencia artificial para consumidores, se trasladará bajo la dirección de Google DeepMind. Esto deja claro que la firma californiana quiere integrar más rápido sus avances en IA en sus productos principales.
Además, el equipo de Google Assistant, que se centra en experiencias para el hogar y dispositivos conectados, pasará a la división de Platforms & Devices, lo que también apunta a una mayor sinergia entre los desarrollos y los productos finales. ¡Parece que Google no solo está ajustando piezas, está rehaciendo todo el tablero de juego!
¿Renovación o más de lo mismo?
Con Fox al frente de la búsqueda y publicidad, y Raghavan tomando un nuevo rol como Chief Technologist, queda la pregunta del millón: ¿será esta una verdadera renovación para Google, o solo una reorganización más?
Por un lado, la llegada de Fox podría traer un enfoque renovado en mejorar la experiencia del usuario en las búsquedas. Tal vez veamos menos anuncios intrusivos y más resultados orgánicos útiles. Por otro lado, el historial de Google con sus anuncios es difícil de ignorar: es una de las fuentes más grandes de ingresos de la empresa, y sería ingenuo pensar que lo abandonarán por completo. Pero si hay alguien que podría equilibrar ambos mundos, ese parece ser Fox.
Para los que llevan años lidiando con resultados de búsqueda cargados de publicidad, crucemos los dedos. Tal vez esta sea la revolución que necesitábamos. O, al menos, un poco menos de publicidad en las primeras posiciones de Google.
