¿Por qué conformarse con ser relevante cuando puedes confundir a todos? Tener un subdominio que no tiene nada que ver con tu sitio principal es como ir a una fiesta de gala en chanclas: disruptivo, sí, pero nadie te tomará en serio. Google, que parece tener un doctorado en etiquetar cosas útiles e inútiles, ahora ha decidido que esos subdominios que van por libre ya no son bienvenidos.
Si tienes un sitio de recetas veganas y un subdominio que vende herramientas de construcción, felicidades: te has convertido en el ejemplo perfecto de lo que Google quiere borrar de sus resultados. La lógica es simple: a los usuarios no les interesa saber qué tal son tus ensaladas si el siguiente clic les lleva a elegir un taladro. ¡Coherencia, amigos, coherencia!
Y no es que Google te odie (o sí, depende de cuántos errores tengas). Simplemente, quiere asegurarse de que tu contenido no provoque la misma confusión que leer un menú en otro idioma sin traducción. ¿Cómo lo hace? Evaluando si tu subdominio y tu dominio principal comparten una temática semánticamente relacionado, si uno habla klingon mientras el otro intenta cantar flamenco.
O te alineas con una estrategia de contenidos clara o Google te convierte en ese invitado que nadie recuerda haber visto en la fiesta del SEO.
“Pero Google dijo que podía hablar de cualquier cosa”
¿Te acuerdas de cuando Google prometía amor incondicional a la diversidad temática? Pues sorpresa: Google también cambia de opinión (como tú cuando ves ofertas en Amazon, no te hagas). Antes, podías tener un blog de marketing digital con un subdominio dedicado al crochet y todo iba bien. Pero ahora, parece que ese romance ha llegado a su fin.
La razón oficial es “mejorar la experiencia del usuario”. Traducido al lenguaje humano: “Deja de marear a la gente”. John Mueller y Danny Sullivan, portavoces de Google, solían decir que la variedad era buena mientras el contenido fuera útil. Pero claro, eso fue hace dos años, y en el mundo del SEO, eso equivale a decir “en el paleolítico”.
Ahora, si tienes un subdominio con un propósito oscuro e incierto, Google lo mira como quien ve a alguien usar calcetines con sandalias: con juicio silencioso pero devastador. El nuevo mantra es “especialización”. Ya no basta con ser interesante; tienes que ser coherente.
Así que, si alguna vez pensaste en montar un subdominio para vender NFTs de tus memes favoritos mientras tu sitio habla de recetas saludables, déjalo. Google no está para bromas (o eso dice).
Cómo “reparar” tu incoherencia temática
¿Quieres mantener tus subdominios sin que Google los tire al basurero digital? Aquí van unos consejos rápidos y dolorosamente obvios que probablemente ignoraste hasta ahora:
1. Analizar la pertinencia de tus subdominios:
• Audita tus subdominios y secciones para identificar aquellos que podrían ser considerados desconectados de la temática principal.
• Elimina o reintegra estos contenidos dentro de una estructura más coherente.
2. Alinear la línea editorial:
• Asegúrate de que cada sección o subdominio refleje una especialización que respalde el dominio principal.
• Crea conexiones lógicas entre los contenidos para guiar tanto a los usuarios como a los motores de búsqueda.
3. Evitar temas demasiado alejados:
• Publicar sobre temas variados sigue siendo posible, pero estos contenidos deben tener una conexión evidente con la misión o la experiencia global del sitio. Tienes que leer esto: La tragedia de perder el norte en tu estrategia de contenido
4. Optimizar la estructura técnica:
• Integra tus contenidos en subcarpetas en lugar de subdominios cuando sea pertinente.
• Usa etiquetas y metadatos para reforzar la contextualización temática.
Ahora, no digas que no te avisamos. Si no haces nada, no te sorprendas cuando Google te haga ghosting.
La revolución de la coherencia
Lo que Google realmente quiere es sencillo: que no compliques la vida de los usuarios. Si tu contenido confunde más que un tutorial mal traducido, prepárate para la penalización. Los subdominios son útiles, sí, pero solo si tienen sentido en el contexto de tu sitio principal.
No es el apocalipsis SEO, pero sí un recordatorio de que Google sigue siendo el dueño de la fiesta, y tú estás ahí porque te dejaron entrar. Si quieres quedarte, juega según sus reglas: sé relevante, sé coherente y, sobre todo, no seas el primo incómodo que habla de unicornios en una boda formal.
La especialización es el nuevo cool. Y si eso significa despedirte de tus subdominios rebeldes, pues que así sea. Al menos ahora tendrás una excusa para decir que “estás optimizando”.
Fuente: https://x.com/googlesearchc/status/1161725709926182912
