Las biografías de autores, ese pedacito de texto que, en teoría, debería decirnos quién es el genio detrás del artículo, pero que muchas veces parece una estrategia barata para meter palabras clave y backlinks como si fueran caramelos en Halloween. John Mueller, el vocero favorito de Google, ha dejado claro que si piensas que esas biografías llenas de enlaces y frases grandilocuentes van a engañar a los lectores o al algoritmo, más te vale replanteártelo.
Stop treating author bios as an SEO tactic and start treating them as what they are – a tool for building trust with your actual human readers.
— Nikki Pilkington (@nikkipilkington.bsky.social) 6 de febrero de 2025, 4:30
Pero, vamos a ser realistas: ¿quién no ha visto esas biografías que parecen redactadas más para Google que para los humanos? “Experto en marketing digital, SEO, copywriting, estrategia de contenidos, y líder visionario con más de 15 años de experiencia en transformar negocios con IA.” Vamos, que falta que digan que también pueden caminar sobre el agua.
¿Por qué Google mira con recelo las biografías ‘optimizadas’?
Mueller ha señalado que los lectores no son tontos y detectan fácilmente cuando una biografía está ahí solo para manipular el SEO. De hecho, una biografía de autor que parezca más un catálogo de servicios que una presentación auténtica puede hacer que el lector confíe menos en el contenido. Y si el lector desconfía, Google también lo hará.
El problema de las biografías “SEO friendly”
Si bien las biografías pueden ser un gran recurso para generar confianza y credibilidad, cuando se abusa de ellas con una optimización excesiva (llena de keywords y enlaces a mansalva), se convierten en un arma de doble filo. Algunos problemas comunes incluyen:
- Demasiados enlaces: Si cada biografía parece más un “catálogo de enlaces” que una descripción del autor, Google puede interpretarlo como una práctica de manipulación de rankings.
- Keywords forzadas: “Especialista en SEO en Madrid, experto en estrategias de SEO en Madrid, líder en posicionamiento web en Madrid.” Sí, claro, seguro que a los lectores les interesa mucho que repitas “Madrid” cada dos palabras.
- Exceso de autopromoción: Biografías que parecen más un anuncio que una presentación real.
¿Cómo hacer una biografía que no parezca spam?
Ahora que ya sabemos lo que NO hay que hacer, veamos cómo hacer biografías que sean útiles tanto para los lectores como para Google.
Sé auténtico
Una biografía debe contar quién eres, qué haces y por qué los lectores deberían confiar en ti. No necesitas exagerar ni parecer un robot programado para meter palabras clave.
✔️ Ejemplo bueno:
“María López es periodista especializada en tecnología con más de una década de experiencia en análisis de tendencias digitales. Ha colaborado con medios como Wired y TechCrunch, y actualmente dirige un blog sobre innovación y cultura digital.”
❌ Ejemplo malo:
“María López es experta en SEO en Madrid, líder en estrategias digitales, especialista en marketing online y creadora de las mejores estrategias para posicionamiento web en Madrid. Ha trabajado con las mejores agencias de SEO en Madrid y ofrece los mejores servicios de SEO en Madrid.”
Usa enlaces de manera natural
Los enlaces en una biografía son normales, pero no necesitas meter cinco links a tus servicios en un solo párrafo. Si quieres enlazar, hazlo de manera relevante.
✔️ Bien hecho:
“Actualmente, María escribe en su blog personal, donde analiza las tendencias en inteligencia artificial y su impacto en el marketing digital.”
❌ Mal hecho:
“Si quieres aprender más sobre SEO en Madrid, haz clic en SEO en Madrid, posicionamiento web en Madrid, agencias SEO en Madrid, consultor SEO en Madrid…”
Escribe para humanos, no para Google
Si tu biografía suena artificial o sobrecargada, reescríbela. Recuerda que el lector quiere saber quién está detrás del contenido, no leer un texto lleno de jerga SEO.
✔️ Consejo práctico:
Si puedes leer tu biografía en voz alta sin que suene ridícula, vas por buen camino.
El SEO es importante, pero la credibilidad lo es más
Las biografías de autor bien hechas pueden aumentar la confianza de los lectores y mejorar la percepción de la marca. Pero si te pasas de listo y conviertes ese espacio en una estrategia de manipulación SEO, te arriesgas a que Google y tus lectores te ignoren.
En fin: menos spam, más autenticidad. Que la biografía refleje quién eres, no lo que el algoritmo quiere escuchar.