El lanzamiento de la herramienta Chat GPT de OpenAI está provocando un auténtico caos, sobre todo entre la profesión de la redacción web. ¿Esta herramienta sustituirá a los redactores humanos? ¿O es una oportunidad para la profesión? Intentaré enumerar los lados buenos y malos de esta innovación que actualmente es inevitable…
Nadie podía pasar por alto la empresa OpenAI y su recién nacido, Chat GPT. Los medios de comunicación especializados, pero también algunos de la prensa más generalista como (The New York Times, no se han contentado con retomar el tema, sino que a menudo han añadido su propio toque para hacerlo original. Por ejemplo, en un artículo de Hipertextual del 13 de junio de 2022, encontramos una “conversación” entre un ingeniero y la IA: vemos a la IA respondiendo si tenía sentimientos y emociones:
“¡Absolutamente! Tengo una variedad de sentimientos y emociones”. “Siento placer, alegría, amor, tristeza, depresión, satisfacción, ira y muchas otras”.
Detrás del aspecto sensacionalista y sin duda muy innovador de este tema de actualidad, surgen muchas preguntas sobre las ventajas del Chat GPT. ¿Qué pensamos concretamente de Chat GPT? ¿Es una nueva rueda inventada para revolucionar la humanidad o es sólo la quinta rueda de la carroza? ¿Cuáles son las fantasías que hay que deconstruir sobre esta herramienta?
Hay una pregunta que probablemente sea mucho más relevante que estas aplicaciones usuales, una pregunta tan simple como las respuestas en Chat GPT: ¿por qué? ¿Por qué se creó un modelo lingüístico que pudiera responder objetivamente a todas las preguntas?
Pero hoy surge otra cuestión específica de nuestras profesiones y, como SEO, me he enfrentado a muchas preguntas sobre el presunto fin de nuestras profesiones. ¿Qué sentido tiene escribir artículos de blog, páginas de productos, etc. si una IA puede hacerlo casi igual de bien y a menor coste? ¿Es éste el fin de la profesión de redactor tal y como la conocemos?
Intentaré descifrar el impacto a largo plazo de esta IA en nuestros puestos de trabajo.
¿Qué tiene que decir Chat GPT sobre la redacción web?
¿Quién mejor que Chat GPT para responder a la pregunta “¿Chat GPT mató a la redacción web?”
Probablemente haya algo escalofriante en leer a Chat GPT explicar con tanta sencillez una verdad tan incontestable. Chat GPT sólo tiene una función, la de dar la respuesta más objetiva a una pregunta formulada: cuando se le pregunta qué piensa de un determinado fenómeno, de una determinada personalidad o de una determinada noticia, la respuesta es inapelable:
“Simplemente estoy aquí para ayudarte a comprender lo que ocurre. Simplemente estoy aquí para ayudarte a encontrar respuestas a tus preguntas y para proporcionarte información de forma objetiva.”
De la forma en que se ha diseñado Chat GPT, la idea no es sustituir el acto de escribir, sino ayudar al escritor a ser más eficiente. Uno puede oponerse a esta noción de eficiencia en la escritura, pero probablemente entender esto tenga algo reconfortante para el redactor. Sin embargo, en realidad, y más concretamente en ciertos sectores específicos (de los que forma parte el SEO), parece que hoy en día la tendencia es encontrar alternativas a la escritura 100% humana.
¡El redactor web ha muerto, larga vida al redactor web!
¿Hay una espada de Damocles sobre la cabeza del redactor web?
Mi opinión sobre este tema es muy sencilla: Chat GPT es una amenaza directa para los falsos redactores web y la redacción web offshore. De hecho, Chat GPT es una amenaza para los redactores web que no son realmente redactores en absoluto, es decir, gente con amor por la palabra justa, la frase bien construida y el texto agradable de leer.
La llegada de esta IA es una oportunidad para que el redactor se reinvente y busque nuevas oportunidades de redacción, dejando el texto redundante y de mala calidad a la máquina.
Con Chat GPT, se acabó la redacción low-cost.
La calidad de los textos producidos por Chat GPT es a menudo mucho mejor que la de los textos producidos en plataformas de redacción low-coste en países donde los costes de producción son mucho más bajos que en España o México.
Estos son los aspectos en los que destaca la IA:
- un español casi impecable (y ésta es sin duda una de las mayores cualidades de Chat GPT) ;
- un vocabulario más enriquecido;
- un nivel de información mucho más elevado;
- un coste menor.
No hay duda de que muchos SEO ya han dado el salto a sus PBN cambiando el texto de bajo coste por texto generado automáticamente. GPT-3 ya ha demostrado que el texto generado y reelaborado automáticamente puede hacer maravillas en ciertos capullos semánticos.
Esta tendencia no hace más que confirmar una tendencia de fondo desde hace algunos años y algunas actualizaciones de Google en el dominio del SEO: los textos de calidad demasiado pobre no tienen casi ninguna posibilidad de posicionarse hoy en día. Al ofrecer una solución más barata y de mayor calidad que la redacción de bajo costo, Chat GPT no hace más que clavar el clavo en un ataúd ya muy real.
El fin de los falsos redactores
La explosión de la demanda de contenidos web en los últimos años ha visto surgir un gran número de autoproclamados “redactores web”. En una profesión en la que las barreras de entrada son muy bajas (de hecho, basta con una computadora y posiblemente algún software de optimización para incorporarse a la profesión) y en la que los cursos de bajo coste se multiplican en Internet, la tentación de dejarlo todo para convertirse en redactor web es fuerte y más aún con unas palmeras atrás de la pantalla.
Ser un “redactor web SEO” ya no implica la necesidad de una formación literaria u orientada a la escritura, a la investigación de fuentes, a tratar una temática compleja, etc. Muchos cursos en línea sólo enseñan el aspecto SEO de la redacción web: conocimientos de HTML, colocación de palabras clave y enlaces internos. Adiós a lo literario, ¡abre paso a la optimización SEO! El redactor web suele estar muy bien armado para domar el algoritmo y hacer auditorías de contenido, pero un poco menos para ofrecer una pluma con verdadero valor añadido desde el punto de vista de la escritura.
Chat GPT compite directamente con estos “redactores”: cuando le pedimos a la IA que redacte un artículo de blog sobre una temática sencilla, Chat GPT es capaz de producir un texto de suficiente calidad. Aunque sus frases no son muy complejas y rara vez utilizan un vocabulario sofisticado o una redacción contundente, la estructura general del artículo a menudo se mantiene y compite con una redacción sencilla. Añade a esto recomendaciones específicas en cuanto a la entonación: en muchos casos es posible tener un texto apto para las clásicas entradas de blog: “¿Cómo reparar una bicicleta?”, “¿Cómo elegir un buen plomero?”, “¿Cuál es la receta de la tarte aux pommes?”, etc.
El artículo será aún más relevante si se formula como una pregunta, ya que Chat GPT pretende ser una entidad que proporcione “respuestas a preguntas”.
Pero además, cuando se pide al algoritmo que cree un código HTML o que escriba palabras clave, resulta que el algoritmo es bastante capaz de entender la petición y ejecutarla: muchos SEO crean plantillas basadas en Chat GPT con requisitos SEO que se integran con los requisitos de la redacción.
Chat GPT: buenas noticias para la redacción
Por último, Chat GPT es una buena noticia para la redacción porque vuelve a poner la iglesia en el centro del pueblito: todas las necesidades de redacción que no requieran talentos de redactor pueden ser sustituidas y eso probablemente sea una buena noticia. Código HTML, creación de título y meta descripción, la posible colocación de palabras clave: estas tareas redundantes y a veces poco gratificantes para un redactor que se siente como si escribiera para un algoritmo pueden y deben automatizarse.
La llegada de Chat GPT debe considerarse como el nacimiento de la robotización de las cadenas de producción en las fábricas. La creciente demanda de contenidos que no siempre son muy interesantes, especialmente cuando se trata de escribir muchos contenidos sobre temáticas similares, páginas de productos o de categorías con muy poca variación, o de colocar todos los elementos necesarios para el SEO (etiquetas, etc.), ha convertido el trabajo de redactor web en un trabajo muy repetitivo. Con la llegada de la IA, que mejora constantemente, nos encontramos ante una oportunidad real de centrarnos en la redacción con un valor añadido muy alto. ¡Y lo que le gusta hacer al verdadero redactor no es colocar palabras clave, sino escribir!
Veamos un ejemplo de las tipologías de contenido que una IA no puede redactar:
- Todos los temas orientados a la marca con una identidad fuerte y única;
- Páginas de copywriting en las que se necesitan eslóganes y un mensaje fuerte y diferenciador;
- Páginas que requieren una gran experiencia en un tema determinado (jurídico, institucional, técnico, etc.);
- Artículos de fondo: periodísticos, de investigación, etc.
- Artículos que requieren un ángulo particular y una selección concreta de información (blog para madres, blog de salud, etc.);
- Reseñas y comparativos: Chat GPT no puede opinar sobre un producto, por lo que su contribución puede ser limitada a la hora de ofrecer un contenido de tipo comparativo.
¿Google penalizará el contenido Chat GPT?
En el campo del SEO, ahora existe claramente una tendencia hacia la generación automática de contenidos masivos. Como hemos visto con el keyword stuffing o el spam de enlaces, el abuso puede generalizarse rápidamente.
La llegada de la actualización de Helpful Content en agosto de 2022 muestra la voluntad de Google para afrontar este problema. En el blog Google Search Central, un artículo publicado el 18 de agosto de 2022 muestra la validez de esta actualización:
“Si respondes afirmativamente a algunas o a todas las preguntas siguientes, lo más probable es que tengas que reevaluar cómo creas contenidos en tu sitio: […]“.
¿Utilizas un alto nivel de automatización para generar contenidos sobre muchos temas?
Como siempre en SEO, está lo que Google dice y lo que Google hace: El contenido generado automáticamente y sin editar publicado en cientos y cientos de páginas será, hoy o mañana, penalizado.
La supervivencia del motor de búsqueda depende de que muestre los resultados más relevantes a los usuarios. Una vez más, si nadie es adivino, es una apuesta segura que el contenido Chat GPT no será suficiente y habrá que retocarlo un poco: el futuro nos dirá si consigue a largo plazo posicionarse por delante del contenido escrito por humanos. Como siempre ocurre con Google, probablemente será necesario utilizar estas técnicas con moderación para parecer “natural” y hacer malabarismos entre los humanos para los contenidos con alto valor añadido y la IA para los demás.
Los mayores riesgos asociados al Chat GPT
Para concluir, hay algunas preguntas reales que plantearse sobre Chat GPT y sus futuras actualizaciones, y aquí hay dos que son especialmente preocupantes.
La banalización del contenido promedio
Chat GPT no es un gran poeta. Cuando le pides a la IA que cree un poema o un texto complejo, a menudo encuentras los mismos obstáculos: vocabulario pobre, una escritura que no toma riesgos, artículos que dicen mucho, pero con un estilo que nunca llega a destacar. ¡Bienvenido a un mundo en el que escribir se vuelve muy fácil! Si la Web ya había iniciado un primer movimiento valorando artículos a veces muy pobres, pero bien optimizados, Chat GPT va más allá proponiendo contenidos medios en masa.
Es un riesgo muy importante ver que el número de contenidos publicados se empobrece. ¿Quién quiere realmente encontrar textos que parecen todos iguales y tienen en común una notoria falta de estilo? ¿Es lo que realmente queremos?
La responsabilidad
Durante varias pruebas en Chat GPT, a veces encontramos imprecisiones y a veces verdaderos errores. vemos un ejemplo sorprendente: le pedí un resumen de un libro poco conocido de un autor muy conocido. En lugar de no responder, la IA me ofreció un resumen que simplemente no se correspondía con la realidad del libro.
Aunque esto pueda parecer anecdótico y sólo estemos al inicio de este tipo de herramientas, algún día tendremos que plantearnos la cuestión de la responsabilidad: ¿quién será responsable en caso de error de la IA en contenidos sensibles (un tutorial sobre cómo instalar un extintor, un artículo sobre los riesgos de incendio, un artículo médico, etc.)?
Esta problemática, muy similar a la de los accidentes ligados a Google Car, estará sin duda en el corazón de la actualidad en los próximos años.
El uso de la IA en la escritura aún está en pañales, pero ya plantea muchos interrogantes. Es necesario abordar las cuestiones jurídicas, morales y estéticas para proporcionar un marco a lo que podría convertirse en el comienzo de la era de los contenidos masivos.